Rennes es la capital regional de Bretaña y es famosa por sus encantadoras casas de entramado de madera, su gran catedral gótica y el tranquilo Parc du Thabor, una zona de más de 10 hectáreas.
La ciudad está repleta de cosas divertidas e interesantes que hacer, desde explorar las calles empedradas de la ciudad vieja hasta visitar la gran cantidad de galerías, museos, tiendas y mercados.
Este itinerario de 3 días por Rennes incluye todos los principales lugares de interés de esta histórica ciudad, que se encuentra a medio camino entre St Malo y Nantes. Pongámonos en marcha y descubramos las mejores cosas que hacer en Rennes, Francia.
Comienza la primera mañana de tu itinerario de 3 días por Rennes explorando el maravilloso casco antiguo (Rennes Centre Historique). Pasea por las calles empedradas y maravíllate con las magníficas casas de entramado de madera de colores brillantes que representan algunas de las mejores arquitecturas de Bretaña.
Dirígete a la increíble Catedral Saint-Pierre de Renes en Rue de la Monnaie. Aunque este lugar ha contado con una iglesia desde el siglo VI, la catedral que conocemos hoy en día data del siglo XII y pertenece al estilo gótico neoclásico. La catedral está abierta a los visitantes durante todo el año, y todos los días de 10 am a 7 pm, y vale la pena visitarla para admirar su arquitectura, que incluye un altar con mármol del Foro de Roma que fue un regalo del Papa Pío IX.
Desde la Rue de la Monnaie, dirígete a la Rue des Portes Mordelaises para ver la impresionante puerta del mismo nombre que marca la entrada al casco histórico. Esta antigua puerta de entrada data de 1440 y cuenta con intrincadas inscripciones que contienen los nombres de la realeza francesa de todas las épocas.
Regresaremos por las sinuosas callejuelas del casco antiguo hasta la Basílica de San Sauveur, una basílica católica romana que data del siglo XI. El edificio de estilo neoclásico se elevó a basílica gracias a las historias de varios milagros a lo largo de los siglos y actualmente sirve como diócesis parroquial para Rennes.
Después del almuerzo, nos dirigiremos hacia el este a través del casco antiguo hasta el Palais Saint-Georges en la Rue Gambetta. Este gran edificio gubernamental fue construido en 1674 en el sitio de una antigua abadía benedictina, la Abadía de San Jorge.
El edificio ahora se utiliza como centro de administración civil, pero es posible admirar la arquitectura y explorar los hermosos jardines. ¡Por la noche, el edificio está iluminado y es una gran imagen!
Podría decirse que la joya de la corona de Rennes es el enorme Parc du Thabor, que se encuentra a poco menos de un kilómetro al este del Palais Saint-Georges. Tardarás unos 12 minutos aproximadamente en recorrerlo. Este gran parque público es un excelente lugar para venir y escapar del ajetreo y el bullicio de la ciudad y disfrutar del tiempo paseando por los hermosos jardines franceses e ingleses, con sus caminos que se cruzan, jardines de rosas y más.
En el extremo oriental del Parc du Thabor se encuentra el jardín botánico (Jardin Botanique et Roseraie). Aquí encontrarás todo tipo de flora de todo el mundo. Tanto el Parc du Thabor como el Jardín Botánico están abiertos todo el año las 24 horas del día para que los turistas puedan disfrutarlo, y el paisaje cambia con las estaciones, lo que significa que la visita siempre será gratificante sin importar la época del año.
En la segunda mañana de tu itinerario de 3 días por Rennes, comienza en el centro cultural de los Campos Libres, al sur del casco histórico. El complejo contiene la Biblioteca Renes, el Museo de Bretaña, el Planetario y un parque científico, por lo que es el lugar perfecto para llevar a la familia a pasar el día.
Si quieres conocer la historia de la región, una visita al Museo de Bretaña es una excelente parada en tu itinerario. El museo está dedicado a la arqueología y la etnología y alberga más de 600.000 artículos con exposiciones que van desde fotografías hasta monedas, mapas, postales y más.
Dirígete a la Biblioteca de Rennes, que ofrece fantásticas vistas de la ciudad, y también organiza talleres y eventos semanales para niños y adultos por igual. Consulta el sitio web para ver qué está pasando durante tu visita.
El Museo de Bellas Artes alberga una impresionante colección de pinturas, dibujos y antigüedades que datan del antiguo Egipto. Sin embargo, la atención se centra en pinturas de los siglos XIV al XXI e incluye obras de renombrados artistas renacentistas como Paris Bordone, Paolo Veronese y Leandro del Ponte.
Terminaremos el día con un agradable paseo por el Vilaine en el Promenade des Bonnets Rouges. Haz una parada para tomar un café, un helado o un pastel en una de las pastelerías que encontrarás por el camino, o disfruta de un vaso de alguna bebida burbujeante en uno de los bares del río.
El hermoso Ayuntamiento está clasificado como Monumento Histórico gracias a su diseño barroco y su importancia histórica. El edificio albergaba originalmente una estatua de Luis XV que fue destruida durante la Revolución Francesa. Más tarde fue reemplazada por una estatua de Ana de Bretaña, la última gobernante soberana de la región, pero que a su vez fue destruida por una bomba en 1932 plantada por nacionalistas bretones. El pedestal ha permanecido vacío desde entonces.
A pocos pasos del Ayuntamiento, más allá de la Ópera, se encuentra el edificio del Parlamento bretón, que data de 1655. El edificio destaca por sus frescos ornamentados en el techo, su gran cámara y sus pintorescos patios.
Dirígete al sureste hacia el canal hasta el destino final del día, la preciosa iglesia de Eglise St Germaine. Esta iglesia histórica data de 1470 e incorpora estilos gótico y renacentista. Está abierto al público de domingo a viernes de 9 a 19 h.
Terminaremos la tarde en Rennes con un pintoresco paseo en barco por el río Villain o explorando los canales de la ciudad. Hay muchas opciones, desde alquilar botes eléctricos o kayaks, hasta excursiones por el río con comida y bebida incluidas. ¿Qué mejor manera de terminar tu estancia en esta encantadora ciudad que flotando suavemente a través de sus innumerables vías fluviales? Incluso es posible "navegar" por el hermoso campo fuera de la ciudad, por lo que podrás pasar todo el día aquí.
Rennes es un destino maravilloso para los gourmets y el lugar perfecto para degustar la cocina local bretona. Dada la proximidad de la ciudad al mar, hay muchos mariscos frescos, aunque hay restaurantes para todos los gustos y presupuestos.
Dada su fantástica ubicación a menos de una hora en coche de St Malo y de la preciosa costa de Bretaña, el verano es sin duda una de las mejores épocas para visitar Rennes.
Con muchas actividades al aire libre, desde pasear por el casco antiguo y el Parc du Thabor, hasta explorar los castillos cercanos, hacer senderismo en el campo y disfrutar de una cena al aire libre en uno de los muchos cafés y restaurantes de la ciudad, Rennes es el destino perfecto para tus vacaciones de verano.
Las temporadas bajas de primavera y otoño también son un buen momento para visitar, ya que encontrarás menos turistas y precios de hotel más baratos. También hay muchas atracciones en el interior para mantenerte ocupado incluso en los meses más fríos del invierno, como el Museo de Bellas Artes y el complejo de los Campos Libres, con muchas opciones de entretenimiento.
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